RIOBAMBA EN NOVIEMBRE

Casa en la que se reunieron los riobambeños para la declaratoria de Independencia el 11 de noviembre de 1820



Placa recordatoria de la independencia
Fue la tarde del sábado 11 de noviembre de 1820, a las cuatro y más. Había gente armada y, algunos, pasaron gritando: “Viva la Patria”. Entre los convocados estuvo Don Agustín Velasco, que incluso recriminaba a los que aparecían por la calle y no se dirigían al lugar de reunión; la casa de Don Diego Donoso.
Varios vecinos se auto convocaron; otros fueron llamados por dos y más veces. Algunas personas a caballo recorrían el poblado y pedían que asistan a la reunión. 
Un criado de la Casa de Doña Ana María Pontón, invitaba a nombre de Don Diego Donoso, por aquello asistió José Velarde. Don Juan José Larraín, fue porque, por dos veces, fue llamado a nombre del Gobierno recién formado.
En el salón había mucha gente, no todos tenían asientos; era un tumulto desordenado. 
D. Tomás Guzmán, alias “El Cholo Virrey”, propuso el nombre de Don Juan Bernardo de León como Gobernador Político y Militar de la Villa, lo que fue aceptado por aclamación por los asistentes. D. Juan Bernardo se excusó, resistió y pidió que alguien más le acompañe, pero la multitud insistió que debía ser él. 
Llegó la noche, entre las seis y ocho, cuando el joven llamado José Antonio Flor de la Bandera, por tener buena letra, escribía el acta de independencia y, que por las exigencias de los asistentes, el escribano Don Baltasar Paredes, dictaba el texto que “… en pocos renglones y escrito con sencillez...”, decía:
Se establece un Gobierno de libertad independiente de la Monarquía Española.
Se nombra por aclamación a Don Juan Bernardo de León como Gobernador Político y Militar de la Villa de Riobamba.
“Al concluir la conformación del acta, el escribano, Don Baltasar Paredes, la leyó, y procedieron a firmarla… aunque la firmaron muchos, quedó incompleta sobre la mesa porque a tiempo dijeron que entraban los Soldados (derrotados) del Camino Real de Guaranda, con cuya novedad se deshizo la junta”. El acta quedó en manos de Don Juan Bernardo de León.
Otro joven, Don Manuel Domínguez, de veinte y cinco años de edad: “fue llamado a escribir, en otro cuarto, el oficio que se pasó a Guaranda al comandante del Ejército Patriótico de Guayaquil para que desviara su dirección a esta Villa…”.

Comentarios

bmxpapirich ha dicho que…
Chevere esta síntesis ! =) 11 de Noviembre mi cumpaleaños jeje !tenia que saber poquito de la historia siquiera graciias !!.-

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